lunes, 22 de febrero de 2016

Con motivo del Jubileo se abre al público la necrópolis de San Pablo Extramuros

Con motivo del Jubileo de la Misericordia se abrirá al público el cementerio donde fue enterrado San Pablo tras su martirio. Esta necrópolis salió a la luz en las excavaciones que se realizaron entre 1917 y 1918 y es uno de los mejores testigos que muestran la sociedad romana de los primeros siglos después de Cristo.
San Pablo

De algunas tumbas se conservan todavía los frescos y gracias a las inscripciones se puede conocer también la identidad de los difuntos. Los hay jóvenes y ancianos y también libertos, los famosos esclavos que eran puestos en libertad por sus dueños.

San Pablo fue enterrado en una zona situada entre Roma y Ostia, el puerto de la antigua capital del mundo, en un lugar donde ya existía un gran cementerio. Todas las necrópolis se realizaron fuera de las murallas de Roma, como lo mandaba el Derecho romano, que prohibía el entierro o incineración dentro de la ciudad.
Basílica de San Pablo Extramuros

Al igual que ocurrió con San Pedro, el sepulcro de San Pablo se convirtió en un centro de peregrinación. Sobre su tumba se construyó una basílica, San Pablo Extramuros, que los papas suelen visitar cada 25 de enero para clausurar una semana de oración por la unidad de los cristianos. Fue allí donde Juan XXIII anunció el Concilio Vaticano II.